1. Nebulosa solar: Nuestro sistema solar comenzó como una nube gigante de gas y polvo llamada nebulosa.
2. colapso gravitacional: Esta nube se derrumbó bajo su propia gravedad, girando más rápido y aplanándose en un disco.
3. Acreción: Las partículas de polvo y gas dentro del disco comenzaron a agruparse a través de colisiones y fuerzas electrostáticas, formando cuerpos más grandes llamados planetesimales.
4. Sistema solar interno: En la región interna y más caliente del disco, donde se formó el sol, los elementos ligeros como el hidrógeno y el helio fueron impresionados por el viento solar. Esto dejó elementos más pesados como Rock and Metal, que se acumuló para formar los planetas Rocky (Mercurio, Venus, Tierra, Marte).
5. Sistema solar externo: En la región externa más fría, los elementos más ligeros como el hidrógeno y el helio pudieron condensar y contribuir a la formación de los gigantes de gas (Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno).
En resumen: Los planetas rocosos se formaron más cerca del sol en el sistema solar interno porque el intenso calor del sol temprano alejó elementos más ligeros, dejando elementos más pesados que formaron los planetas rocosos.