Según los expertos, el documento, conocido como "Manuscrito Quipucamayoc", es el registro escrito más antiguo que se conoce sobre matemáticas andinas. El manuscrito fue descubierto en una cueva en la provincia de Huarochirí de Lima, Perú, y se cree que data de finales del siglo XVI o principios del XVII.
El manuscrito contiene una serie de nudos atados con hilos de colores, que representan números y otra información. Los nudos están dispuestos en columnas, y cada columna representa una potencia de cinco diferente. Los símbolos utilizados en el manuscrito son similares a los utilizados en el quipu inca, un sistema de cuerdas anudadas que se utiliza para llevar registros y comunicarse.
El documento muestra que los pueblos andinos tenían un sofisticado sistema matemático que se adaptaba bien a sus necesidades. El sistema se basó en el número cinco, que se refleja en la disposición de los nudos y los símbolos utilizados. Este sistema permitió a los andinos representar y manipular grandes números, que eran importantes para tareas como contar ganado, medir tierras y calcular impuestos.
El descubrimiento del Manuscrito de Quipucamayoc proporciona información valiosa sobre el conocimiento y las prácticas matemáticas de los pueblos andinos antes de la llegada de los españoles. Es un testimonio del rico patrimonio intelectual y cultural del Imperio Inca.