El ciclo de la roca es la sucesión continua de formación, erosión y reforma de la roca. Sus fuerzas han moldeado la superficie de la Tierra durante 4.500 millones de años. Sus propiedades que dan vida están impulsadas por grandes corrientes de convección en el manto que causan movimientos de la corteza (tectónica de placas) que forman continentes, cadenas montañosas y cuencas oceánicas. Con el tiempo, la corteza terrestre ha sido alterada, reformada y erosionada para formar rocas ígneas, sedimentarias y metamórficas.
Early Rock Cycle
Las primeras rocas (ígneas) de la Tierra se enfriaron de una fusión, formando dos tipos de rocas generales. : basalto y granito. El basalto es una roca densa, rica en hierro y forma los fondos oceánicos. El granito es una roca menos densa y rica en silicato que comprende los continentes. Su erosión gradual libera nutrientes en la biosfera.
Formación del suelo
La superficie de la Tierra se encuentra en un lento pero continuo estado de reciclaje, lo que finalmente crea suelo (la sustancia en la que prosperan las plantas). La tierra dinámica permite su formación, sin la cual no habría plantas ni ninguna otra vida.
Minerales para la Vida
Los movimientos de la corteza terrestre liberan minerales que sostienen la vida como el sodio, hierro, potasio y calcio en la biosfera. El sodio y el potasio son cruciales para el sistema nervioso, mientras que el calcio es un componente esencial para la síntesis de los huesos.
Energía
El ciclo de la roca es predecible y proporciona información sobre las ubicaciones probables de las fuentes de energía. Por ejemplo, los combustibles fósiles se encuentran en entornos sedimentarios, mientras que los elementos radiactivos para la energía nuclear (uranio) se pueden encontrar en entornos ígneos o sedimentarios.
Materiales de construcción
Se han utilizado hierro, piedra caliza, mármol, granito y basalto. utilizado para materiales de construcción durante miles de años. Las estructuras de las ciudades dependen de ellas, su existencia se debe al ciclo de las rocas.
Gemas y Monedas
El oro, los diamantes, los rubíes y las esmeraldas se han utilizado y se siguen utilizando como moneda, inversiones y adornos. Sus descubrimientos se basaron en el conocimiento de los procesos de la Tierra y han jugado un papel clave en las transacciones sin problemas del comercio entre sociedades.