Sin embargo, otra teoría propone que el núcleo interno en realidad se está reduciendo. Las observaciones sísmicas han indicado que el núcleo interno gira ligeramente más rápido que el resto del interior de la Tierra. Esta rotación diferencial podría estar generando calor a través de un proceso conocido como calentamiento viscoso, derritiendo partes del núcleo interno y provocando que se contraiga.
Comprender estos procesos y dinámicas dentro del núcleo interno de la Tierra es esencial para desentrañar la estructura interior profunda del planeta, rastrear su evolución a largo plazo y descifrar su impacto en el comportamiento dinámico de la superficie de la Tierra.