* Las bombillas incandescentes son menos eficientes: Convierten una gran parte de su energía en calor, en lugar de luz. Esto significa que una cantidad significativa de energía se desperdicia como calor, lo que lleva a un mayor consumo de electricidad.
* Las bombillas fluorescentes son más eficientes: Utilizan menos energía para producir la misma cantidad de luz. Esto se debe a que convierten una mayor porción de su energía en luz, con menos desperdicio de calor.
En resumen: A pesar de que ambos edificios usan electricidad para la iluminación, las bombillas incandescentes atraerán más potencia y darán como resultado mayores facturas de electricidad en comparación con las bombillas fluorescentes.