1. Electricidad de los paneles solares: Esta es la conexión más directa. Los paneles solares capturan la energía del sol y la convierten en electricidad, lo que puede alimentar sus electrodomésticos y luces.
2. Combustibles fósiles: Aunque menos directos, los combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas natural se formaron durante millones de años a partir de la antigua materia vegetal y animal que originalmente derivaba su energía del sol a través de la fotosíntesis. Cuando quemamos estos combustibles para generar electricidad, estamos liberando la energía almacenada del sol.