1. Apague las luces cuando sales de una habitación: Esto parece obvio, pero muchas personas se olvidan de hacerlo.
2. Unplug Electronics cuando no está en uso: Incluso cuando se apagan, muchos productos electrónicos atraen potencia fantasma.
3. Use electrodomésticos de eficiencia energética: Busque las etiquetas de la estrella de energía al comprar nuevos electrodomésticos.
4. Lave la ropa en agua fría y seque al aire: La mayoría de las lavadoras usan más energía para calentar el agua que para lavar la ropa.
5. Tome duchas más cortas: Una ducha de 5 minutos utiliza significativamente menos agua y energía que una ducha de 15 minutos.
6. Use luz natural siempre que sea posible: Abra cortinas y persianas para dejar que la luz del sol entre en su hogar.
7. Planta árboles y arbustos alrededor de su casa: Los árboles pueden proporcionar sombra y reducir su necesidad de aire acondicionado.
8. Drive menos: Camine, bicicleta, viaje en automóvil o tome el transporte público siempre que sea posible.
9. Baje el termostato en invierno y créelo en verano: Cada grado que baja su termostato puede ahorrarle dinero en su factura de calefacción.
10. Use un termostato programable: Un termostato programable puede ajustar automáticamente su calefacción y enfriamiento según su horario.