Específicamente, usan uranio-235 , que es un isótopo fisible de uranio. Esto significa que cuando se bombardea con neutrones, se divide (fisión) y libera una tremenda cantidad de energía. Esta energía se usa para calentar el agua, lo que produce vapor, y luego gira las turbinas para generar electricidad.
Si bien el uranio es el combustible más común, hay algunos diseños de reactores más nuevos que exploran el uso de otros materiales, como el torio. Sin embargo, el uranio sigue siendo la fuente de combustible dominante para las centrales nucleares hoy.