1. Velocidad del viento: Cuanto más fuerte es el viento, más energía transfiere al agua, creando olas más grandes y poderosas.
2. Duración del viento: Cuanto más tiempo sopla el viento en una dirección, más tiempo tendrá que transferir energía al agua, lo que resulta en olas más grandes.
3. buscar: La búsqueda es la distancia sobre la cual sopla el viento en una sola dirección. Una búsqueda más larga permite que el viento transfiera más energía al agua, lo que resulta en ondas más grandes.
Estos tres factores trabajan juntos para determinar el tamaño y el poder de las ondas oceánicas.