* aumentó la temperatura corporal: Durante el ejercicio extenuante, el cuerpo genera mucho calor. La evaporación del sudor es el mecanismo principal para enfriar el cuerpo y mantener una temperatura central segura.
* aumentó la tasa de sudor: A medida que el cuerpo se calienta, la producción de sudor aumenta para facilitar el enfriamiento evaporativo. Esto significa que se está perdiendo más agua a través del sudor.
* Impacto de los factores ambientales: La tasa de evaporación está influenciada por factores como la humedad, la temperatura del aire y el viento. En condiciones cálidas y húmedas, la evaporación es menos eficiente, lo que lleva a una mayor pérdida de energía.
* Consecuencias de la pérdida de energía: Perder una cantidad significativa de agua y electrolitos a través del sudor puede provocar deshidratación y desequilibrios de electrolitos, lo que puede afectar negativamente el rendimiento. Esto puede incluir fatiga, calambres musculares e incluso agotamiento por calor.
Entonces, si bien no es algo positivo, el aumento en la pérdida de energía por evaporación es una respuesta fisiológica natural a las demandas de una intensa actividad física. Los atletas deben ser conscientes de esto y tomar medidas para evitar la deshidratación y la pérdida de electrolitos para mantener el rendimiento y la seguridad.