* Radiación solar: El sol emite constantemente energía en forma de radiación electromagnética. Esta radiación viaja a través del espacio y llega a la tierra.
* Absorción: La atmósfera y la superficie de la Tierra absorben una porción de esta radiación solar.
* Efecto de invernadero: Ciertos gases en la atmósfera, como dióxido de carbono, metano y vapor de agua, atrapan parte del calor absorbido, evitando que se escape al espacio. Este efecto de captura se conoce como el efecto invernadero, y es esencial para mantener la tierra lo suficientemente cálida como para apoyar la vida.
* calor interno: El interior de la Tierra también genera calor a partir de la descomposición radiactiva de los elementos. Este calor contribuye a la actividad volcánica y las fuentes de energía geotérmica.
Otros factores que influyen en la temperatura de la Tierra:
* la inclinación de la Tierra: La inclinación de la Tierra causa estaciones, lo que lleva a diferentes cantidades de radiación solar recibida por diferentes partes del planeta en diferentes momentos del año.
* corrientes oceánicas: Las corrientes oceánicas distribuyen calor en todo el mundo, moderando temperaturas en varias regiones.
* Albedo: La reflectividad de la superficie de la Tierra (albedo) influye en la cantidad de radiación solar que se absorbe. Por ejemplo, la nieve y el hielo reflejan más luz solar, mientras que las superficies más oscuras absorben más.
* Actividades humanas: Las actividades humanas, como la quema de combustibles fósiles, liberan gases de efecto invernadero en la atmósfera, mejoran el efecto invernadero y conducen a un fenómeno conocido como calentamiento global.
En resumen, el sol es la fuente principal del calor de la Tierra, y el efecto invernadero juega un papel crucial en el mantenimiento de una temperatura habitable. Sin embargo, otros factores contribuyen a las variaciones de temperatura en todo el mundo.