Si la energía del sol fuera absorbida y no se readiada, la temperatura de la superficie de cualquier planeta aumentaría continuamente. He aquí por qué:
* Balance de energía: Los planetas mantienen una temperatura estable porque absorben energía del sol e irradian parte de esa energía al espacio. Esto crea un equilibrio energético.
* Efecto de invernadero: Algunos gases en la atmósfera de un planeta, como el dióxido de carbono, atrapan el calor y evitan que escape al espacio. Este es el efecto de invernadero natural, que mantiene al planeta lo suficientemente cálido para la vida.
* Calefacción fugitiva: Si el planeta dejara de volver a irradiar cualquiera de la energía absorbida, el calor atrapado se acumularía con el tiempo. Esto conduciría a un efecto de invernadero fugitivo, lo que provocó que la temperatura se dispare.
* Consecuencias: El calor extremo derretiría cascos de hielo, evaporaba los océanos y eventualmente haría que el planeta sea inhabitable para la mayoría de las formas de vida.
En resumen, la ausencia de readiación haría que un planeta se sobrecaliente y se convierta en un páramo abrasador.