* El dióxido de carbono (CO2) es un componente importante: La atmósfera contiene una cantidad significativa de CO2, un gas de efecto invernadero que atrapa el calor e influye en el clima de la Tierra.
* Intercambiando constantemente el carbono: La atmósfera intercambia constantemente carbono con otras tiendas a través de procesos naturales como fotosíntesis, respiración y descomposición. Esto significa que el carbono fluye dentro y fuera de la atmósfera regularmente.
* Las actividades humanas impactan el equilibrio: Las actividades humanas, particularmente la quema de combustibles fósiles, liberan grandes cantidades de CO2 en la atmósfera, alteran el equilibrio natural y causan una acumulación de CO2. Esto lleva al cambio climático.
Entonces, si bien la atmósfera es una tienda de carbono, su tamaño y estabilidad están muy influenciados por los cambios naturales y inducidos por los humanos.