* Estructura atómica: Los átomos están formados por un núcleo que contiene protones y neutrones, rodeados de electrones en niveles de energía o orbitales específicos. La disposición de los electrones determina las propiedades químicas de un átomo.
* Niveles de energía: Cada carcasa de electrones tiene un nivel de energía específico. Los electrones solo pueden existir en estos niveles de energía discretos. Para saltar a un nivel de energía más alto, un electrón debe absorber una cantidad específica de energía (una cantidad de energía).
* Requisitos de energía únicos: Diferentes elementos e incluso diferentes isótopos del mismo elemento tienen configuraciones de electrones únicas. Esto significa que tienen diferentes niveles de energía y, por lo tanto, requieren diferentes cantidades de energía para excitar sus electrones.
Ejemplo:
* Un átomo de hidrógeno (con un protón y un electrón) necesita una cantidad específica de energía para excitar su electrón a un nivel de energía más alto.
* Un átomo de helio (con dos protones y dos electrones) necesita una cantidad diferente de energía para excitar sus electrones.
Absorción y emisión:
* Absorción: Los átomos absorben energía (generalmente en forma de luz) para mover sus electrones a niveles de energía más altos.
* Emisión: Cuando los electrones excitados recurren a niveles de energía más bajos, liberan la energía absorbida como luz u otras formas de radiación electromagnética.
En resumen: Los átomos no absorben la misma energía porque tienen estructuras de nivel de energía únicas dictadas por sus configuraciones de electrones. La energía específica requerida para excitar un átomo está determinada por la diferencia de energía entre su estado fundamental y el estado excitado.