1. La bombilla: El bulbo en la parte inferior del termómetro contiene un líquido, generalmente mercurio o alcohol, que se expande cuando se calienta y se contrae cuando se enfría.
2. El tubo capilar: El bulbo está conectado a un tubo de vidrio delgado y sellado llamado tubo capilar. El tubo es estrecho para amplificar los pequeños cambios en el volumen del líquido.
3. La escala: El tubo capilar está marcado con una escala, que puede estar en Celsius (° C), Fahrenheit (° F) u otras unidades.
Cómo funciona:
* Calefacción: Cuando el termómetro está expuesto al calor, el líquido dentro de la bombilla se expande. Esta expansión hace que el líquido suba por el tubo capilar estrecho.
* enfriamiento: Cuando el termómetro está expuesto al frío, el líquido se contrae. Esto hace que el líquido vuelva a caer por el tubo capilar.
* Lectura: El nivel del líquido en el tubo capilar corresponde a la temperatura que se mide. Lees la temperatura mirando la escala donde el nivel de líquido lo cumple.
Puntos clave:
* Se usan líquidos: El mercurio se usa tradicionalmente en termómetros debido a su alto coeficiente de expansión térmica y su capacidad para mantener el líquido en un amplio rango de temperatura. Sin embargo, debido a que el mercurio es tóxico, los termómetros a base de alcohol ahora son más comunes.
* Sensibilidad: La estrechez del tubo capilar hace que el termómetro sea sensible a pequeños cambios de temperatura.
* Calibración: Los termómetros se calibran para garantizar la precisión comparándolos con una referencia de temperatura estándar.
En resumen: Un termómetro de bulbo funciona utilizando la expansión y la contracción de un líquido en respuesta a los cambios de temperatura. El movimiento del líquido hacia arriba o hacia abajo del tubo capilar nos permite leer la temperatura en función de la escala.