1. Carbohidratos: Esta es la principal fuente de energía para la mayoría de los organismos. Están compuestos de átomos de carbono, hidrógeno y oxígeno. Los ejemplos incluyen azúcares (glucosa, fructosa), almidones y celulosa.
2. lípidos (grasas y aceites): Estos son más ricos en energía que los carbohidratos y sirven como almacenamiento de energía a largo plazo. También son importantes para el aislamiento y otros roles estructurales. Los ejemplos incluyen triglicéridos, fosfolípidos y colesterol.
Si bien los carbohidratos son la principal fuente de energía para la mayoría de los organismos, los lípidos proporcionan una forma más concentrada de energía que a menudo se utiliza para las necesidades a más largo plazo.