La convección es el proceso de transferencia de calor mediante el movimiento de un fluido. En el caso del interior de la Tierra, la convección ocurre en el manto, que es la capa de roca debajo de la corteza. El manto se calienta con el calor del núcleo de la Tierra, y este calor hace que la roca del manto se eleve. A medida que la roca caliente asciende, se enfría y vuelve a hundirse, creando corrientes de convección.
La conducción es el proceso de transferencia de calor por contacto directo entre dos objetos. En el caso del interior de la Tierra, la conducción se produce entre el manto y la corteza, y entre la corteza y la atmósfera. El manto es mucho más caliente que la corteza, por lo que el calor fluye del manto a la corteza por conducción. La corteza también es más caliente que la atmósfera, por lo que el calor fluye desde la corteza a la atmósfera por conducción.