Sí, la ropa de colores oscuros generalmente absorbe más calor que la ropa de colores claros. Esto se debe a que los pigmentos de colores oscuros, como el negro y el azul marino, absorben más energía luminosa y la convierten en calor. Por el contrario, la ropa de colores claros, como el blanco y los tonos pastel, refleja más energía luminosa y, por tanto, absorbe menos calor.