La eliminación de desechos nucleares es un inconveniente importante para el uso de la energía nuclear porque actualmente no existe una forma segura y permanente de eliminar desechos de alto nivel radiactivo. Los reactores nucleares producen desechos de alta actividad radiactiva y permanecen radiactivos durante miles de años. Esto significa que debe almacenarse de forma que se evite que entre en contacto con el medio ambiente y dañe a las personas.
Se están estudiando varios métodos diferentes de eliminación de desechos nucleares, pero aún no se ha demostrado que ninguno sea completamente seguro y eficaz. Una opción es almacenar los residuos en depósitos subterráneos profundos. Otra opción es reprocesar los desechos y extraer los materiales reutilizables, que luego pueden usarse para fabricar nuevo combustible nuclear. Sin embargo, ambas opciones tienen sus propios riesgos y desafíos.
La eliminación segura de los desechos nucleares es una cuestión crítica que debe abordarse antes de que se pueda adoptar ampliamente la energía nuclear como fuente de energía. Hasta que se encuentre un método de eliminación seguro y permanente, el uso de la energía nuclear seguirá siendo limitado.