El concepto de presupuestos de carbono es fundamental para comprender y abordar el desafío global del cambio climático. Un presupuesto de carbono se refiere a la cantidad finita de emisiones de dióxido de carbono (CO2) que pueden liberarse a la atmósfera y al mismo tiempo limitar el aumento de la temperatura promedio global a un nivel específico. Este presupuesto está determinado por la cantidad total de gases de efecto invernadero que ya se encuentran en la atmósfera, conocida como emisiones acumuladas, y la sensibilidad del sistema climático a emisiones adicionales.
Establecer el presupuesto global de carbono
El presupuesto de carbono más ampliamente reconocido es el "objetivo de 2 grados Celsius", que apunta a limitar el calentamiento global a 2 grados Celsius (3,6 grados Fahrenheit) por encima de los niveles preindustriales. Este objetivo se estableció en el Acuerdo de París de 2015, un acuerdo internacional histórico para abordar el cambio climático.
Para alcanzar el objetivo de 2 grados Celsius, el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), el principal organismo científico sobre el cambio climático, estimó un presupuesto global de carbono de aproximadamente 2.900 gigatoneladas de CO2 (GtCO2) a partir de 2018. Este presupuesto representa la cantidad total de emisiones de CO2 que se pueden emitir a partir de ese momento para limitar el calentamiento a 2 grados centígrados con una probabilidad del 66%.
Emisiones globales actuales y presupuesto de carbono restante
Según el Global Carbon Project, las emisiones globales de CO2 alcanzaron un récord de 36,4 GtCO2 en 2021. Esto significa que una parte importante del presupuesto de carbono restante ya se ha utilizado, y nuevas emisiones reducirán las posibilidades de mantenerse dentro de los 2 grados centígrados. límite.
Con base en las estimaciones del IPCC y las tendencias actuales de las emisiones, los científicos han predicho que el resto del presupuesto global de carbono podría agotarse por completo en los próximos 25 a 30 años. Esto indica la urgencia de tomar medidas sustanciales y rápidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Presupuestos nacionales de carbono y objetivos de reducción de emisiones
Además del presupuesto global de carbono, muchos países también han adoptado sus presupuestos nacionales de carbono y objetivos de reducción de emisiones. Estos presupuestos nacionales son cruciales para traducir los compromisos globales en acciones específicas a nivel nacional.
Al establecer presupuestos de carbono con base científica e implementar políticas efectivas para reducir las emisiones, los países pueden contribuir a limitar el calentamiento global y minimizar los impactos del cambio climático.
La importancia de las tecnologías de emisiones negativas
Para garantizar que no se supere el presupuesto de carbono restante y lograr emisiones netas cero, es esencial invertir en tecnologías de emisiones negativas. Estas tecnologías eliminan el dióxido de carbono de la atmósfera y lo almacenan de forma segura.
La captura y almacenamiento de carbono (CAC) es un ejemplo destacado de tecnologías de emisiones negativas. La CCS implica capturar CO2 de fuentes industriales o directamente de la atmósfera e inyectarlo bajo tierra para su almacenamiento a largo plazo.
Conclusión
Los presupuestos de carbono proporcionan un marco fundamental para comprender la urgencia y la escala de acción necesarias para abordar el cambio climático. Si cumplimos con los presupuestos de carbono nacionales y globales, implementamos estrategias de reducción de emisiones e invertimos en tecnologías de emisiones negativas, podemos mitigar los impactos del cambio climático y asegurar un futuro sostenible para nuestro planeta.