El uso de trabajadores temporales, también conocidos como trabajadores contingentes, ha ido en aumento en Estados Unidos durante varias décadas. En 1995, los trabajadores temporales constituían el 1,7% de la población activa; en 2010, esa cifra había aumentado al 5,7%. Hoy en día, se estima que hay más de 15 millones de trabajadores temporales en Estados Unidos.
Hay una serie de factores que han contribuido al aumento de trabajadores temporales. Un factor es la creciente demanda de flexibilidad en el lugar de trabajo. A muchas empresas les resulta más rentable contratar trabajadores temporales para proyectos de corta duración o estacionales que contratar empleados a tiempo completo. Los trabajadores temporales también se pueden utilizar para reemplazar a los empleados de tiempo completo que están de vacaciones o de baja por enfermedad.
Otro factor que contribuye al aumento de trabajadores temporales es la creciente globalización de la economía. Muchas empresas han subcontratado empleos a países con costos laborales más bajos y, a menudo, utilizan trabajadores temporales para cubrir los puestos que permanecen en Estados Unidos. Los trabajadores temporales también suelen utilizarse para reemplazar a los empleados de tiempo completo que han sido despedidos debido a condiciones económicas.
El aumento de trabajadores temporales ha tenido una serie de consecuencias para la economía y la fuerza laboral estadounidenses. Una consecuencia es que ha dificultado que los trabajadores encuentren un empleo estable. Los trabajadores temporales suelen recibir salarios y beneficios más bajos que los empleados de tiempo completo, y también tienen más probabilidades de ser despedidos en las crisis económicas. Otra consecuencia del aumento de trabajadores temporales es que ha dificultado que los trabajadores acumulen ahorros para la jubilación y cobertura de seguro médico.
En general, el aumento de trabajadores temporales ha tenido una serie de consecuencias negativas para la economía y la fuerza laboral estadounidenses. Ha hecho más difícil para los trabajadores encontrar un empleo estable, acumular ahorros para la jubilación y obtener cobertura de seguro médico. Como resultado, es cada vez más importante que los trabajadores encuentren formas de protegerse en una economía cambiante.
A continuación se muestran algunas formas en que los trabajadores pueden protegerse en la economía cambiante:
* Infórmese y desarrolle las habilidades que se demandan. Esto lo hará más comercializable para los empleadores y tendrá menos probabilidades de ser despedido.
* Sea flexible y esté dispuesto a aceptar diferentes tipos de trabajos. Cuanto más flexible seas, más probabilidades tendrás de encontrar trabajo.
* Conéctese con otros trabajadores y manténgase actualizado sobre las últimas ofertas de trabajo. Esto le ayudará a estar atento a las oportunidades a medida que surjan.
* Ahorre dinero y cree un fondo de emergencia. Esto le ayudará a afrontar reveses financieros inesperados.
* Participe en su comunidad y defienda políticas que apoyen a las familias trabajadoras. Esto ayudará a crear una economía más equitativa para todos los trabajadores.