1. Estudio del Consejo Americano para una Economía Energéticamente Eficiente (ACEEE): El informe de ACEEE de 2019, "El potencial de ahorro de energía y reducción de emisiones de los códigos de construcción modelo en los Estados Unidos", encontró que la adopción del Código Internacional de Conservación de Energía (IECC) de 2018 o superior en todos los estados podría generar importantes ahorros de energía y reducciones de emisiones. El informe estimó que la adopción del IECC de 2018 reduciría el consumo de energía en los edificios residenciales en un 10% en comparación con el IECC de 2012, y en un 30% en comparación con el IECC de 2006. Para los edificios comerciales, el ahorro energético sería del 13% y el 35%, respectivamente.
2. Estudio del Instituto Nacional de Ciencias de la Construcción (NIBS): El informe de NIBS de 2018, "Manual Nacional de Costos de Construcción", estimó el costo incremental de construir una nueva vivienda unifamiliar para cumplir con el IECC de 2018 en comparación con el IECC de 2012. El estudio encontró que el costo incremental sería aproximadamente el 1,1% del costo total de construcción. Sin embargo, los ahorros de energía derivados del código mejorado darían lugar a facturas de servicios públicos más bajas para los propietarios, lo que daría como resultado un ahorro neto con el tiempo.
3. Estudio realizado por el Departamento de Energía de EE. UU. (DOE): El informe del DOE de 2019, "2019 Ahorros de energía e impactos económicos de los códigos de construcción residencial y comercial Ahorros e impactos económicos de los códigos de construcción residencial y comercial", estimó el ahorro de energía y los impactos económicos de la adopción de códigos energéticos actualizados en edificios residenciales y comerciales. El informe encontró que la adopción de códigos actualizados podría ahorrar a los consumidores hasta $34 mil millones anualmente en sus facturas de servicios públicos y crear 1,2 millones de empleos durante la próxima década.
4. Estudios específicos de cada estado: Varios estados han realizado sus propios estudios para evaluar los beneficios de actualizar los códigos energéticos de la construcción. Por ejemplo, un estudio de 2019 realizado por la Universidad de California, Berkeley, encontró que la adopción del Código de Normas de Construcción de California de 2019 reduciría el consumo de energía en los nuevos edificios residenciales en un 28 % en comparación con el código de 2016. El estudio también estimó que el código actualizado ahorraría a los consumidores $2.4 mil millones anualmente en sus facturas de servicios públicos.
Estos son sólo algunos ejemplos de los beneficios potenciales de actualizar los códigos energéticos de los edificios. Los beneficios específicos para cada estado dependerán del clima, el parque inmobiliario y los precios de la energía. Sin embargo, existe un claro consenso en que la actualización de los códigos energéticos de la construcción puede ahorrar energía, reducir las emisiones y crear empleos.