1. Debilitamiento del Vórtice Polar :El calentamiento global provoca cambios en los patrones de circulación atmosférica y afecta la estabilidad del vórtice polar. El vórtice polar, un sistema de baja presión en el Polo Norte y el Polo Sur, normalmente confina aire extremadamente frío dentro de las regiones polares.
2. Aumento de la actividad de las ondas planetarias :A medida que el calentamiento global debilita el vórtice polar, se vuelve más susceptible a las perturbaciones de las ondas planetarias, ondas de gran escala que viajan en la atmósfera. Estas ondas planetarias pueden propagarse hacia la estratosfera.
3. Calentamiento estratosférico :La propagación ascendente de ondas planetarias provoca un calentamiento significativo en la estratosfera, lo que lleva a eventos de SSW. Los eventos de SSW alteran el gradiente de temperatura habitual entre la estratosfera y la troposfera, provocando que la estratosfera se caliente rápidamente e invirtiendo los vientos predominantes.
4. Propagación descendente :El calentamiento y la alteración estratosférica luego caen en cascada hacia abajo, influyendo en los patrones climáticos en la troposfera, la capa de la atmósfera donde vivimos. Esto puede provocar cambios en los patrones de las corrientes en chorro, lo que hace que el aire frío del Ártico se desplace hacia el sur, lo que a menudo resulta en brotes de frío extremo, fuertes nevadas y bajas temperaturas en regiones que normalmente están menos expuestas a tales condiciones.
5. Efectos no lineales :El efecto de amplificación del Ártico, que se refiere al calentamiento acelerado en el Ártico en comparación con otras regiones, desempeña un papel en la exacerbación de los eventos de SSW y los hace más frecuentes en un clima más cálido. Esto intensifica aún más los fenómenos meteorológicos extremos asociados con el vórtice polar.
6. Imprevisibilidad :El momento exacto, la ubicación y la intensidad de estos fenómenos meteorológicos extremos son difíciles de predecir con precisión debido a la compleja interacción de varios procesos atmosféricos.
En última instancia, si bien el calentamiento global no es directamente responsable de la creación del vórtice polar, sí genera condiciones que contribuyen a su desestabilización y a la aparición de explosiones de vórtices polares frígidos más frecuentes y más extremas.