1. Aumentar los espacios verdes. Los árboles y otras plantas brindan sombra y ayudan a enfriar el aire mediante la evapotranspiración, el proceso mediante el cual las plantas liberan vapor de agua a la atmósfera. Un estudio de la Universidad de California en Berkeley encontró que aumentar la cantidad de cobertura arbórea en una ciudad en solo un 10% puede reducir las temperaturas promedio de verano hasta 4 grados Fahrenheit.
2. Utilice materiales reflectantes. Los materiales reflectantes, como la pintura blanca o el asfalto, pueden ayudar a reducir la cantidad de calor absorbido por los edificios y las carreteras. Esto puede ayudar a mantener la ciudad más fresca durante el día y reducir la cantidad de calor que se libera durante la noche.
3. Instalar techos verdes. Los techos verdes están cubiertos de plantas y tierra, lo que ayuda a aislar los edificios y reducir la cantidad de calor que absorbe el techo. Los techos verdes también ayudan a reducir la escorrentía de aguas pluviales y mejorar la calidad del aire.
4. Promover el transporte activo. Caminar y andar en bicicleta son excelentes maneras de desplazarse por una ciudad sin contribuir a la contaminación del aire. El transporte activo también puede ayudar a reducir la congestión del tráfico y mejorar la salud pública.
5. Crear centros de alivio del calor. Los centros de alivio del calor son lugares donde las personas pueden acudir para refrescarse durante eventos de calor extremo. Estos centros pueden estar ubicados en edificios públicos, como bibliotecas o centros comunitarios, o pueden instalarse en ubicaciones temporales, como tiendas de campaña o unidades portátiles con aire acondicionado.
Al tomar estas medidas, las ciudades pueden ayudar a combatir el calor y crear entornos más habitables para sus residentes.
A continuación se ofrecen algunos consejos adicionales para mantenerse fresco durante eventos de calor extremo:
* Beba muchos líquidos, especialmente agua.
* Evite actividades extenuantes al aire libre.
*Usar ropa holgada y ligera.
* Tome un baño o una ducha fría.
* Utilice ventiladores o aire acondicionado para enfriar su hogar.
* Mantenga las ventanas cerradas durante el día y ábralas por la noche.
* Controle a los vecinos ancianos o enfermos para asegurarse de que se mantengan frescos.
Si experimenta algún síntoma de insolación, como fiebre alta, náuseas o vómitos, busque atención médica de inmediato.