He aquí por qué:
* Fuerza: El acero inoxidable es fuerte y duradero, capaz de resistir las fuerzas colocadas en el esternón durante la curación.
* Biocompatibilidad: El acero inoxidable es bien tolerado por el cuerpo y no causa reacciones o rechazo significativos.
* Resistencia a la corrosión: El acero inoxidable resiste la corrosión, lo cual es importante para prevenir complicaciones y garantizar la estabilidad a largo plazo.
Si bien el acero inoxidable es el material más común para los cables esternales, otros materiales como titanio también se usan en algunos casos. El titanio también es biocompatible y fuerte, pero puede preferirse en individuos con sensibilidades conocidas al acero inoxidable.