1. Alto rendimiento y escalabilidad: Los interruptores empresariales están construidos para entornos exigentes con grandes cantidades de dispositivos conectados. Ellos aparecen:
* Capacidad de conmutación alta: Medidos en GBP (gigabits por segundo), manejan cantidades masivas de tráfico de datos de manera eficiente.
* Funcionalidad de la capa 3: Más allá de la conmutación básica de la capa 2, a menudo admiten capacidades de enrutamiento avanzadas para la gestión de redes complejas.
* Diseño modular: Se pueden ampliar con módulos adicionales (por ejemplo, para más puertos, mayor capacidad) a medida que crecen las necesidades de la red.
2. Características avanzadas y seguridad: Los interruptores empresariales están diseñados con características para garantizar operaciones de red confiables y seguras:
* Calidad de servicio (QoS): Prioriza diferentes tipos de tráfico (por ejemplo, voz sobre IP, transmisión de video) para un rendimiento óptimo.
* Características de seguridad avanzadas: Incluye listas de control de acceso (ACL), detección/prevención de intrusos (IDS/IPS) y soporte para protocolos de autenticación (como 802.1x) para proteger contra el acceso no autorizado y la actividad maliciosa.
* Resiliencia y redundancia: Características como el protocolo de árbol de expansión (STP) y la agregación de enlaces (LAG) mejoran la confiabilidad de la red mediante la prevención de bucles y proporcionando mecanismos de conmutación por error.
Estas características son las que distinguen los interruptores empresariales de los interruptores de grado de consumo o de pequeñas empresas.