El efecto de camuflaje (izquierda) hace que los peatones sean invisibles para los conductores a pesar de la buena iluminación. La interconexión inteligente de faros y alumbrado público invierte este efecto (derecha) y mejora la seguridad. Crédito:Markus Breig, EQUIPO
Es un escenario de terror para todos los conductores:de repente, un peatón previamente invisible sale de la oscuridad entre dos farolas o la sombra de dos autos estacionados. Los investigadores del Instituto de Tecnología de Karlsruhe (KIT) están trabajando en un método para adaptar de manera óptima los faros de los automóviles a las condiciones locales con la ayuda de sensores externos que pueden estar ubicados al costado de la carretera o en otros vehículos.
Cuando las condiciones de iluminación difuminan el contraste entre un objeto y su entorno, los expertos se refieren a él como el "efecto camuflaje". El ojo humano no puede percibir el objeto en estas condiciones. Lo mismo se aplica a los ojos de la cámara de los vehículos autónomos.
El faro "Propix" (acrónimo de la luz del píxel del proyector) desarrollado en el Light Technology Institute (LTI) de KIT hace unos años fue el punto de partida de los científicos. Propix puede adaptar su distribución de luz al entorno, es decir, suprimir ciertas áreas por completo, mientras que otros están iluminados intensamente.
Ahora, los investigadores están trabajando en la interconexión de Propix con otros ultrasonidos, sensores de radar o lidar (que utilizan radiación láser en lugar de ondas de radio) en el automóvil. En caso de que los sensores detecten un obstáculo ubicado en un punto ciego del ojo o la cámara, el faro reaccionará de forma autónoma e iluminará el foco o atenuará la luz. "Combinando farolas fijas con faros variables, se logrará una visibilidad óptima, "Profesor Cornelius Neumann, Jefe de LTI, dice.
Y el objetivo es mucho más ambicioso:el control Propix se debe suministrar no solo con información de los sensores en el vehículo del conductor, sino también de los sensores a bordo de otros vehículos o al costado de la carretera. "El desafío consiste en la interacción entre los diferentes sensores y los faros, "Dice Neumann. En términos humanos, los científicos quieren equipar el automóvil con órganos sensoriales adicionales. "No importa si vemos a una persona que se acerca o solo escuchamos sus pasos, la información es la misma:alguien se nos acerca, "Explica Neumann." Si podemos equipar un coche en consecuencia, podemos hacer que el tráfico por carretera sea más seguro ".
Los investigadores planean probar su nueva tecnología en el área de pruebas de conducción autónoma de Baden-Württemberg que se inauguró en Karlsruhe en mayo de este año. El proyecto OpEr (Optimización de la visibilidad de peatones basado en infraestructura interconectada), por eso, será uno de los primeros proyectos de investigación ejecutados en esta área.