* Arreglo molecular: En los líquidos, las moléculas están juntas, pero tienen más libertad de movimiento en comparación con los sólidos. No se fijan rígidamente en una estructura de celosía como los sólidos.
* Fuerzas intermoleculares: Los líquidos tienen fuerzas intermoleculares más débiles en comparación con los sólidos. Estas fuerzas mantienen juntas moléculas, pero les permiten moverse libremente.
* Compresibilidad: Los espacios entre las moléculas en un líquido son más pequeños que en un gas, pero aún permiten cierta compresión. Sin embargo, la compresión está limitada por la repulsión entre las moléculas.
* Transiciones de fase: Para transformar un líquido en un sólido, debe reducir significativamente el espacio entre las moléculas y aumentar la resistencia de las fuerzas intermoleculares. Esto generalmente requiere una disminución de la temperatura o un aumento de la presión.
En resumen: Los líquidos se pueden comprimir ligeramente, pero la compresión no cambia su estructura molecular lo suficiente como para convertirlos en sólidos. Necesita un cambio significativo en la presión o la temperatura para lograr esa transición de fase.