* Configuración de electrones: El azufre tiene 6 electrones de valencia (electrones en su cubierta más externa). Para ser estable, necesita 8 electrones de valencia (como el noble argón de gas).
* Regla de octeto: La regla del octeto establece que los átomos tienden a ganar, perder o compartir electrones para lograr una cubierta externa completa de 8 electrones.
* Electronegatividad: El azufre es más electronegativo que muchos metales. Esto significa que tiene una atracción más fuerte para los electrones.
* Formación de enlaces iónicos: Cuando el azufre se encuentra con un metal (como sodio, Na), que tiene una electronegatividad más baja y solo 1 electrones de valencia, el azufre "roba" ese electrón. Esto deja azufre con 7 electrones en su carcasa externa, y el metal (como el sodio) se carga positivamente.
El resultado es que el azufre se convierte en un ion cargado negativamente (S²⁻) y el metal se convierte en un ion cargado positivamente (Na⁺). Estos iones cargados opuestos se atraen entre sí, formando un vínculo iónico.
En resumen, el azufre gana electrones en enlaces iónicos para lograr una configuración de octeto estable y una carga negativa.