Procesos naturales:
* Photosíntesis: Las plantas, las algas y algunas bacterias usan dióxido de carbono para producir sus alimentos (azúcares) y liberar oxígeno. Este es el fregadero natural más grande para dióxido de carbono.
* Absorción del océano: El océano absorbe una cantidad significativa de dióxido de carbono, aunque se está saturando cada vez más. Esta absorción conduce a la acidificación del océano.
* Weathering: Las rocas, especialmente las que contienen calcio y magnesio, reaccionan con dióxido de carbono en el agua de lluvia y liberan iones de bicarbonato en ríos y, finalmente, en el océano.
* suelo: Los microbios del suelo y la materia orgánica se descomponen, que implica tanto la liberación como la absorción de dióxido de carbono.
* bosques: Los bosques son un gran fregadero de carbono, ya que los árboles almacenan grandes cantidades de carbono en su madera y raíces.
Intervenciones humanas:
* Captura y almacenamiento de carbono (CCS): Esta tecnología captura dióxido de carbono de fuentes industriales y lo almacena bajo tierra, evitando que ingrese a la atmósfera.
* forestación y reforestación: Plantar árboles ayuda a absorber dióxido de carbono de la atmósfera.
* Bioenergía con captura y almacenamiento de carbono (BECCS): Este enfoque implica cultivar cultivos, quemarlos para obtener energía y capturar el dióxido de carbono liberado durante la combustión, almacenarlo bajo tierra.
Es importante tener en cuenta:
* El equilibrio de la absorción y liberación de dióxido de carbono es crucial para mantener un clima estable.
* Las actividades humanas, particularmente la quema de combustibles fósiles, están aumentando la cantidad de dióxido de carbono en la atmósfera, lo que lleva al calentamiento global.
* Comprender y mejorar los sumideros de carbono natural y el desarrollo de intervenciones humanas efectivas son vitales para mitigar el cambio climático.