* Aluminio: Ligera, buena conductividad de calor y relativamente económica. A menudo se encuentra en radiadores más nuevos.
* acero: Durable, resistente a la corrosión, y se puede formar fácilmente en diferentes formas. A menudo se encuentra en radiadores más antiguos.
* hierro fundido: Retención de calor pesada, excelente y duradera. Históricamente muy común, pero menos frecuente ahora debido al peso y el costo.
El metal específico utilizado en un radiador dependerá de factores como la edad del radiador, su propósito previsto y las preferencias del fabricante.