* Simplicidad: Es sencillo calcular y comprender. Simplemente divida el volumen del soluto por el volumen total de la solución y se multiplique por 100%.
* directamente relatable: El porcentaje por volumen relaciona directamente la cantidad de soluto con el volumen total de la solución, lo que hace que sea más fácil visualizar la concentración. Por ejemplo, una solución v/v de 10% significa que 10 ml de soluto están presentes en cada 100 ml de solución.
* Conveniente para líquidos: Es particularmente útil para soluciones donde tanto el soluto como el solvente son líquidos, ya que refleja directamente la relación de volumen entre los dos.
* Adecuado para diluciones: Es relativamente fácil diluir soluciones preparadas por volumen. Simplemente use la relación de volumen apropiada para lograr la concentración deseada.
Sin embargo, hay algunas limitaciones para usar porcentaje por volumen:
* Dependencia de la temperatura: El volumen depende de la temperatura. Si la temperatura de la solución cambia, el volumen de soluto y solvente cambiará, alterando potencialmente la concentración.
* No es ideal para sólidos o gases: Es menos útil para soluciones donde el soluto es un sólido o un gas. El volumen de un sólido o de gas puede variar mucho con la presión y la temperatura, lo que lo hace menos confiable para representar con precisión la concentración.
Alternativas al porcentaje por volumen:
* por ciento por masa (% w/w): Esto es más preciso para sólidos y gases, ya que la masa es una medida más confiable que el volumen.
* MOLARITY (M): Esto expresa la concentración como moles de soluto por litro de solución, lo que lo hace ideal para reacciones y estequiometría.
En general, mientras que el porcentaje por volumen tiene sus limitaciones, sigue siendo una herramienta valiosa para los químicos, particularmente para preparar y describir soluciones donde tanto el soluto como el solvente son líquidos.