1. Electrólisis: Este es el método más común. Pasar una corriente eléctrica a través del agua la separa en sus elementos constituyentes, hidrógeno (H₂) y oxígeno (O₂). Este proceso se utiliza para producir gas de hidrógeno.
2. Descomposición térmica: Calentar el agua a temperaturas muy altas (por encima de 2000 ° C) puede romper los enlaces entre el hidrógeno y el oxígeno, lo que resulta en su separación. Este no es un método práctico debido a las temperaturas extremas requeridas.
3. Fotólisis: El uso de fotones de alta energía (como los de la luz ultravioleta) puede romper los enlaces en las moléculas de agua, lo que lleva a la formación de hidrógeno y oxígeno. Este método se utiliza en algunas aplicaciones de investigación.
4. Reacciones químicas: Ciertos productos químicos, como el metal de sodio (NA) o el metal de litio (Li), reaccionan vigorosamente con agua para producir gas de hidrógeno y el hidróxido de metal correspondiente.
5. Radiación: La radiación de alta energía, como los rayos gamma o los rayos X, también puede romper los enlaces en las moléculas de agua, lo que conduce a la descomposición.
En resumen, la descomposición del agua se puede lograr mediante electrólisis, descomposición térmica, fotólisis, reacciones químicas y radiación.