1. Termómetros:
* Galinstan: Una aleación de galio, indio y estaño que es líquido a temperatura ambiente y tiene un coeficiente de expansión similar al mercurio.
* alcohol: Típicamente de color rojo de color, es una alternativa menos tóxica y más fácilmente disponible.
* termómetros digitales: Estos se están volviendo cada vez más comunes debido a su precisión, velocidad y seguridad.
2. Barómetros:
* Barómetros aneroides: Estos usan una cámara de metal sellada que se expande y contrae la presión del aire, eliminando la necesidad de mercurio.
3. Lámparas fluorescentes:
* Lámparas fluorescentes compactas (CFL) y bombillas LED: Estos son mucho más eficientes en energía y no contienen mercurio.
4. Dispositivos médicos:
* No-Mercury Spigmomanómetros: Estos usan un sensor electrónico en lugar de una columna de mercurio para medir la presión arterial.
* Amalgama dental no mercurio: Las resinas compuestas y los cementos de ionomer de vidrio son alternativas que no contienen mercurio.
5. Aplicaciones científicas:
* Otros metales: Dependiendo de la propiedad específica necesaria, se pueden usar otros metales como galio, talio o bismuto.
* Alternativas no metálicas: En algunos casos, los polímeros, la cerámica o incluso el agua pueden servir como reemplazos.
6. Otros usos:
* Mercury Switches: Las alternativas incluyen interruptores de láminas magnéticas, interruptores de estado sólido o interruptores mecánicos.
* Lámparas de vapor de mercurio: Estos están siendo reemplazados por luces LED para la eficiencia energética y la seguridad.
Nota importante: Al considerar alternativas, es crucial tener en cuenta las propiedades específicas del mercurio que son importantes para la aplicación, como su punto de ebullición, conductividad o densidad.
Recuerde, Mercurio es un elemento altamente tóxico, y siempre es mejor minimizar su uso y deshacerse de él correctamente. Si tiene Mercurio, consulte a su agencia ambiental local para obtener orientación.