* nueva sustancia formada: El óxido (óxido de hierro) es una sustancia completamente diferente del hierro. Tiene una composición, color y propiedades químicas diferentes. Esto indica que ha tenido lugar una reacción química.
* irreversible (sin más reacciones químicas): No puede simplemente revertir el proceso y convertir el óxido en hierro por medios físicos como calefacción o enfriamiento. Necesitaría una reacción química, como la reducción.
* Evidencia de una reacción: La oxidación implica la reacción de hierro con oxígeno y agua. Esta es una reacción química, y la reacción libera el calor (aunque no notablemente).
* Cambio en las propiedades: El óxido es quebradizo y desmenuzable, a diferencia de la fuerte uña de hierro metálico. Este cambio en las propiedades es otro indicador de un cambio químico.
En resumen: La oxidación es un cambio químico porque implica la formación de una nueva sustancia (óxido de hierro) con diferentes propiedades que la sustancia original (hierro). Este cambio es irreversible sin más reacciones químicas.