La forma y el volumen dependen del estado de la materia:
* sólido: Los sólidos tienen una forma y volumen definidos. Resisten los cambios en ambos.
* líquido: Los líquidos tienen un volumen definitivo pero toman la forma de su recipiente.
* Gas: Los gases no tienen una forma definida ni volumen; Llenan el contenedor que ocupan.
La forma y el volumen no nos cuenten sobre la estructura interna, la composición o las propiedades del material.
Así es como se clasifican los materiales científicamente:
* Composición química: Los tipos y proporciones de los átomos en un material (por ejemplo, el agua es h₂o, el oro es au)
* Propiedades físicas: Características medibles como densidad, punto de fusión, punto de ebullición, conductividad y dureza.
* Estructura: Cómo se organizan los átomos (por ejemplo, estructura cristalina, estructura amorfa).
Ejemplo:
* agua: Un líquido con un volumen definido, pero toma la forma de su recipiente. Su composición química es H₂O, y tiene propiedades físicas específicas como un punto de ebullición de 100 ° C.
* Iron: Un sólido con una forma y volumen definidos. Es un elemento con propiedades químicas específicas y una estructura cristalina.
En conclusión:
Si bien la forma y el volumen son descriptores importantes, no son las herramientas principales para clasificar los materiales. Los científicos usan composición química, propiedades físicas y estructura para clasificar los materiales y comprender su comportamiento.