He aquí por qué:
* Bajo punto de ebullición: El helio tiene el punto de ebullición más bajo de todos los elementos (-268.9 ° C o -452 ° F). Esto significa que se convierte en un gas a temperaturas extremadamente bajas.
* No hay estado sólido a presión atmosférica: Para convertir el helio en un sólido, necesita una presión increíblemente alta (aproximadamente 25 atmósferas) y temperaturas muy bajas (alrededor de -272 ° C o -458 ° F).
Entonces, si bien el helio puede existir como líquido en condiciones específicas, se conoce principalmente como gas en escenarios cotidianos.