* Inertidad química: El oxígeno es químicamente inerte, lo que significa que no reacciona fácilmente con otras sustancias. Esto es crucial para las aplicaciones médicas, ya que previene reacciones dañinas dentro del cuerpo o con los materiales del cilindro.
* no inflamabilidad: El oxígeno en sí no es inflamable, aunque admite la combustión. Esta característica de seguridad garantiza que los cilindros de oxígeno sean seguros de manejar y almacenar en hospitales.
* Abundante disponibilidad: El oxígeno es el elemento más abundante en la atmósfera de la Tierra, lo que lo hace fácilmente disponible y relativamente económico para extraer y purificar.
* Necesidad médica: El oxígeno es esencial para la vida y se utiliza para una amplia gama de aplicaciones médicas, incluido el tratamiento de afecciones respiratorias, las cirugías de apoyo y la asistencia a los pacientes en cuidados críticos.
* Facilidad de compresión: El oxígeno se puede comprimir fácilmente en un estado líquido, lo que permite almacenar grandes cantidades en cilindros relativamente pequeños.
* Release controlada: Los cilindros de oxígeno están equipados con reguladores de presión y medidores de flujo para garantizar una liberación segura y controlada de oxígeno a los pacientes.
Mientras que otros gases como el nitrógeno y el helio se utilizan en los hospitales, el oxígeno se destaca debido a su papel vital en la respiración humana y su naturaleza segura y fácilmente disponible.