1. Formación de una nueva sustancia: Este es el indicador más fundamental. Se formará una nueva sustancia con diferentes propiedades de los reactivos originales. Por ejemplo, cuando el hierro se oxide, se forma una nueva sustancia llamada óxido de hierro, que es un sólido marrón rojizo a diferencia del hierro brillante original.
2. Cambio de color: Un cambio de color a menudo indica una reacción química. Por ejemplo, cuando mezcla bicarbonato de sodio y vinagre, la solución burbujea y cambia de color.
3. Producción de gas (efervescence): La liberación de burbujas de gas es una fuerte indicación de una reacción química. Por ejemplo, cuando el bicarbonato de sodio se mezcla con vinagre, se libera gas de dióxido de carbono.
4. Producción de calor o luz (reacción exotérmica o endotérmica): Una reacción química puede liberar calor (reacción exotérmica), haciendo que el entorno sea más caliente o absorbe el calor (reacción endotérmica), haciendo que el entorno sea más frío. Por ejemplo, la madera ardiente es exotérmica, libera calor y luz.
Es importante tener en cuenta que no todos estos indicadores necesariamente significan que ha ocurrido un cambio químico. Por ejemplo, un cambio de color podría deberse a un cambio físico, como disolver el color de alimentos en el agua. Sin embargo, si hay múltiples indicadores presentes, es una fuerte indicación de que se ha producido un cambio químico.