He aquí por qué:
* Fuerzas intermoleculares: Los líquidos tienen fuerzas intermoleculares más fuertes (como la unión de hidrógeno, las interacciones dipolo-dipolo y las fuerzas de dispersión de Londres) que los gases. Estas fuerzas atraen las partículas, manteniéndolas más juntas.
* Energía cinética: Si bien las partículas en un líquido tienen suficiente energía cinética para moverse libremente, no tienen suficiente para superar por completo las fuerzas intermoleculares. Esto significa que permanecen cerca el uno del otro, pero aún pueden fluir.
Imagínelo así:
Piense en una habitación llena de gente llena de gente bailando. Las personas pueden moverse pero todavía están bastante cerca una de la otra. Esto es similar a las partículas en un líquido.
Diferencia clave de los sólidos:
En un sólido, las fuerzas intermoleculares son lo suficientemente fuertes como para sostener las partículas en una estructura fija y rígida. Esto significa que están bien empacados y tienen muy poco espacio entre ellos.
Diferencia clave de los gases:
En un gas, las fuerzas intermoleculares son muy débiles, y las partículas tienen mucha más energía cinética. Esto les permite moverse libremente y extenderse, lo que resulta en grandes espacios entre ellos.