En el oxígeno gaseoso (O2), el enlace entre los dos átomos de oxígeno es un enlace covalente. Un enlace covalente se forma cuando dos átomos comparten electrones para completar sus capas de valencia. En el caso del oxígeno, cada átomo tiene seis electrones de valencia y comparten dos de estos electrones para formar un doble enlace. Este doble enlace es muy fuerte y es responsable de la estabilidad del oxígeno gaseoso.