El rocío es vapor de agua que se condensa sobre los objetos de la superficie de la Tierra, normalmente en forma de pequeñas gotas. Ocurre cuando la temperatura del objeto desciende por debajo del punto de rocío, que es la temperatura a la que el aire ya no puede retener todo el vapor de agua que contiene. El rocío es más común temprano en la mañana, cuando el aire es fresco y el suelo está cálido.