1. Fotosíntesis:
La fotosíntesis es un proceso biológico vital realizado por plantas, algas y algunas bacterias. Implica la conversión de dióxido de carbono (CO2) en compuestos orgánicos, principalmente glucosa, utilizando la energía de la luz solar. Como subproducto de la fotosíntesis, se libera oxígeno (O2) a la atmósfera. Esta liberación de oxígeno es consecuencia de la división de las moléculas de agua (H2O) durante el proceso.
Los primeros organismos capaces de realizar la fotosíntesis fueron probablemente las cianobacterias, antiguas bacterias fotosintéticas que surgieron hace unos 3.500 millones de años. Estas primeras cianobacterias prosperaron en ambientes acuáticos y sus actividades fotosintéticas comenzaron a aumentar gradualmente los niveles de oxígeno en los océanos y la atmósfera. Con el tiempo, a medida que proliferaron las cianobacterias, la producción de oxígeno se aceleró, lo que llevó a la oxigenación de la atmósfera primitiva de la Tierra.
2. Fotólisis del vapor de agua:
La fotólisis se refiere a la descomposición de moléculas mediante la absorción de energía luminosa. En la atmósfera primitiva de la Tierra, abundaban las moléculas de vapor de agua (H2O). La energía de la radiación ultravioleta (UV) del sol era lo suficientemente fuerte como para dividir el vapor de agua en hidrógeno (H2) y oxígeno (O2).
El hidrógeno, al ser un gas liviano, escapó al espacio debido a su alta velocidad y baja atracción gravitacional. Por otro lado, el oxígeno se acumulaba en la atmósfera. El escape de hidrógeno y la producción de oxígeno mediante fotólisis contribuyeron aún más a la oxigenación de la Tierra.
Sin embargo, vale la pena señalar que la atmósfera de la Tierra permaneció en gran medida anóxica (sin una cantidad significativa de oxígeno) durante un período prolongado. Fueron necesarios miles de millones de años para que los efectos combinados de la fotosíntesis y la fotólisis alcanzaran un punto en el que el oxígeno libre se volviera lo suficientemente abundante como para transformar la atmósfera en su actual estado rico en oxígeno.
El Gran Evento de Oxigenación (GOE), que ocurrió hace aproximadamente 2.300 millones de años, se considera un punto crucial en la historia de la Tierra cuando los niveles de oxígeno en la atmósfera y los océanos aumentaron dramáticamente, lo que llevó a la diversificación y expansión de los organismos aeróbicos y, finalmente, dio forma a las condiciones necesarias. para que evolucionen formas de vida complejas.