El nitrógeno es el gas más abundante en la atmósfera y representa aproximadamente el 78% de su volumen. Es esencial para el crecimiento de las plantas y se utiliza para elaborar fertilizantes, que ayudan a que los cultivos crezcan más sanos y produzcan más alimentos. El nitrógeno también se utiliza para fabricar explosivos, como el nitrato de amonio, que se utiliza en la minería y la construcción.