Para realizar la prueba de llama, se mantiene una muestra de la sustancia que se está probando en una llama utilizando un alambre de nicromo o un bucle de platino. Se observa atentamente el color de la llama. Si la llama muestra un color amarillo brillante, indica la presencia de iones de sodio, lo que sugiere la presencia de una impureza de cloruro de sodio.
Es importante tener en cuenta que la prueba de llama es una prueba cualitativa y puede detectar la presencia de iones de sodio, pero no puede determinar la concentración o cantidad exacta de cloruro de sodio presente. Además, la presencia de otras sustancias en la muestra también puede afectar el color de la llama, por lo que se debe tener cuidado al interpretar los resultados con precisión.