La cáscara de un huevo es un material compuesto que es una mezcla principalmente de carbonato de calcio (CaCO3) y proteína. El componente proteico de la cáscara del huevo tiene varias funciones importantes, una de las cuales es unir los cristales de carbonato de calcio. El color y la textura de la cáscara del huevo también se ven afectados por compuestos orgánicos como pigmentos, lípidos y proteínas. Por tanto, la cáscara de un huevo es una mezcla y no una sustancia pura.