Nicotina, Representación 2D esquelética molecular alternativa que muestra la conformación 3D de su anillo a la energía más baja en el espacio real. Crédito:dominio público
Muchas personas que fuman o mastican tabaco parecen no poder escapar de las propiedades adictivas de la nicotina. Los estudios muestran que las mujeres en particular parecen tener más dificultades para dejar de fumar, incluso con ayuda, en comparación con los hombres. Ahora, Los científicos informan en un estudio con ratones publicado en la revista ACS. Investigación química en toxicología que la diferencia en los patrones de tabaquismo de género y los efectos del tabaquismo podría deberse a cómo la nicotina afecta la relación cerebro-intestino.
El tabaquismo ha sido durante mucho tiempo un importante problema de salud pública. Está relacionado con una de cada cinco muertes en los EE. UU., según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. Cuando una persona fuma tabaco, la nicotina se distribuye principalmente a los pulmones. Pero con parches en la piel y tabaco de mascar, la nicotina atraviesa la piel y llega al tracto gastrointestinal, respectivamente. Investigaciones anteriores han demostrado que la nicotina y el sistema nervioso interactúan, produciendo una serie de efectos, incluida la liberación de la dopamina, una sustancia química que hace que se sienta bien. Los estudios también han demostrado que los efectos de la nicotina dependen del género. Para comprender mejor por qué es así, Kun Lu y sus colegas querían explorar cómo la nicotina afecta a los microbiomas intestinales masculinos y femeninos.
Los investigadores establecieron un experimento de 13 semanas durante el cual administraron agua con infusión de nicotina a ratones. Un análisis de las muestras fecales de los animales mostró grandes diferencias en la composición de los microbiomas en ratones machos y hembras. Los niveles de compuestos y genes bacterianos asociados con el sistema nervioso y el peso corporal se alteraron de diferentes formas en ratones machos y hembras. Por ejemplo, los ratones expuestos a la nicotina, especialmente los machos, tenía concentraciones más bajas de glicina, serina y ácido aspártico, que podría debilitar el efecto adictivo de la nicotina. Además, Los ratones hembra tratados con nicotina tenían cantidades reducidas de bacterias Christensenellaceae, mientras que los ratones machos tratados tenían niveles aumentados, que se asocian con un índice de masa corporal más bajo. El equipo dice que los esfuerzos futuros se centrarán en explorar la relación de las interacciones nicotina-intestino-cerebro a nivel molecular para comprender mejor las vías de comunicación involucradas.