La temperatura de fusión del papel de aluminio es de 660 grados Celsius (1,220 grados Fahrenheit) a presión estándar, por lo que no se derrite con las temperaturas encontradas en un horno doméstico estándar. La forma física del aluminio, ya sea polvo, bloques, papel de aluminio o alguna otra forma, no afecta el punto de fusión, siempre y cuando el metal sea relativamente puro; el punto de fusión es una propiedad intrínseca del metal, pero la forma no lo es.
¿Por qué el aluminio se derrite?
Las fuerzas que atraen una molécula a otra determinan el punto de fusión; cuanto más fuerte es la atracción, mayor es la temperatura requerida para derretir la sustancia. Las vibraciones moleculares producidas por el calentamiento superan las fuerzas intermoleculares cuando la temperatura pasa el punto de fusión. Para las sustancias metálicas, los átomos no forman moléculas tanto como grandes masas de átomos unidos; esto se llama enlace metálico. Cuando las vibraciones del calor superan los enlaces, los átomos se liberan el uno del otro y el metal se derrite.