* Versatilidad: El carbono tiene la capacidad única de formar cuatro enlaces químicos con otros átomos. Esto permite la creación de una gran variedad de moléculas complejas y estables.
* Formación de cadena: Los átomos de carbono pueden unirse en cadenas largas, formando la columna vertebral de las moléculas orgánicas. Estas cadenas pueden ser rectas, ramificadas o incluso anillos de forma.
* Diversidad de grupos funcionales: Los diferentes átomos y grupos de átomos (grupos funcionales) pueden unirse a las cadenas de carbono, cambiando drásticamente las propiedades de la molécula. Esto permite la creación de diversas moléculas con funciones únicas.
* Esencial para las moléculas orgánicas: Las cuatro clases principales de moléculas orgánicas que son esenciales para la vida (carbohidratos, lípidos, proteínas y ácidos nucleicos) se construyen alrededor del carbono.
En esencia, la capacidad del carbono para formar moléculas estables, complejas y diversas lo convierte en el elemento ideal para construir las estructuras y llevar a cabo las funciones necesarias para la vida tal como la conocemos.