Daño del microscopio:
* Dejando o golpeando el microscopio: Los microscopios son instrumentos delicados, y una caída puede dañar fácilmente las lentes, el escenario u otros componentes.
* Usando fuerza excesiva al enfocar: Girar las perillas de enfoque con demasiada fuerza puede forzar el mecanismo o incluso romper la lente objetivo.
* Clean las lentes con materiales abrasivos: Solo use papel de limpieza de lentes especializados y soluciones para la limpieza de lentes de microscopio. Las toallas de papel, los tejidos o los químicos duros pueden rayar las delicadas superficies de la lente.
* Dejando el microscopio expuesto al polvo y la humedad: El polvo puede acumularse en las lentes y otras partes, y la humedad puede provocar corrosión. Siempre cubra el microscopio con una cubierta de polvo cuando no esté en uso.
* Usando el tipo incorrecto de aceite de inmersión: El aceite de inmersión se usa con objetivos de alta potencia, pero el tipo incorrecto puede dañar la lente. Siempre use aceite diseñado específicamente para microscopía.
Daño de la muestra:
* Usando presión excesiva al montar la muestra: Esto puede aplastar o distorsionar la muestra, lo que dificulta la observación.
* Usando el medio de montaje incorrecto: Algunas muestras requieren medios de montaje específicos para preservar su estructura. Usar el medio incorrecto puede dañar la muestra.
* Exponer el espécimen a temperaturas extremas: El calor o el frío pueden dañar las muestras delicadas.
* Uso de productos químicos duros en el espécimen: Algunos productos químicos pueden disolver o distorsionar muestras.
* Dejando el espécimen en el escenario durante demasiado tiempo: Algunas muestras pueden degradarse con el tiempo, especialmente si se exponen a la luz o al aire.
En general, siempre maneje un microscopio y muestras con cuidado. Siga los procedimientos adecuados para la limpieza, el montaje y el almacenamiento de ambos.